Diferencias entre Jamón y Paleta

En qué se diferencian jamón y paleta es una de las dudas más frecuentes entre las personas que quieren comprar una pieza de ibérico de calidad. La verdad es que, hay diversos factores que hacen que cada producto sea totalmente diferente.

De lo que no cabe ninguna duda es que tanto jamón como paleta son productos exquisitos y perfectos protagonistas de las cenas más preciadas.

En Esencia Victoria queremos que entiendas y conozcas las diferencias entre el Jamón y la paleta, junto con las características de cada uno de ellos. Te animamos a descubrir todas las particularidades de estos suculentos ibéricos, para que la próxima vez que tengas que comprar una pieza u otra, elijas aquella que mejor se adapte a tí, tus necesidades y gustos.

¿EN QUÉ SE DIFERENCIAN JAMÓN Y PALETA?

Tanto el jamón como la paleta siguen un proceso de tres pasos de elaboración: salazón, secado y maduración. Este rasgo que comparten, en ocasiones, puede suponer  que sea difícil distinguirlos al paladar y puedan confundirse.

LA PROCEDENCIA

La diferencia más significativa entre jamón y paleta es de dónde procede cada pieza.Por un lado, el jamón se obtiene de las patas traseras del cerdo, mientras que la paleta se extrae de las patas delanteras. De hecho, este último recibe el nombre de paleta o  paletilla ya que, anatómicamente, así es como se le llama a la parte delantera del cerdo.

EL TAMAÑO Y EL PESO

La segunda diferencia más importante está directamente relacionada con el tamaño de cada una de las piezas: los jamones son más largos que las paletas.

En cuanto a la anchura de cada una de las piezas, el jamón, como es lógico, supera de nuevo a la paletilla. El jamón es más ancho y redondeado, en comparación con la finura de una paletilla.

Como es obvio, las diferencias de tamaño afectan al peso. El peso de las paletas  rondan los 5kg de media, mientras que en los jamones la media suele estar en 8,5kg, a veces incluso más.

Esto se traduce en que el jamón tiene más cantidad de carne, debido al tamaño y a la proporción de hueso, factor que permite un corte más sencillo. Mientras que, la pata delantera, al ser más pequeña y tener más hueso, contiene menos cantidad de carne y un corte algo más complicado.

LA CURACIÓN

​​El tamaño de la pata, la anatomía del animal y el porcentaje de carne de cada pieza también suponen que jamón y paleta se diferencien en el tiempo de curación.  El jamón tarda un mínimo de 36 meses en alcanzar el punto óptimo de curación, mientras que una paleta reduce este tiempo a 24 meses. Esto supone nuevas diferencias: en sabor y en precio.

EL SABOR

Aquí dependerá de lo sibarita que seas. Aunque estamos hablando de diferencias sutiles, el sabor del jamón y la paleta es un factor muy influyente a la hora de adquirir uno de estos selectos productos para muchos consumidores.

Una cosa está clara: ambos son productos procedentes del cerdo de una exquisitez inigualable, pero con ricos matices:

• El jamón ofrece sabores más variados y complejos, perfecto para los paladares más experimentados en degustación de ibéricos.
• En cambio, la paleta,  tiene un sabor más intenso y menos matices en el paladar, ya que el tiempo de curación es diferente.

Las características y singularidad de cada uno de estos productos hace imposible determinar cuál de ellos es mejor.

EL PRECIO

Obviamente, el precio también es un aspecto clave a la hora de diferenciar estos dos productos y es el resultado de diversos factores comentados anteriormente. Como hemos visto, el tamaño, el rendimiento y la curación suponen que haya una diferencia entre jamón y paleta. Como es normal, la paleta es ligeramente más económica que el jamón.